A finales de 2007 una mujer fue asesinada en España tras participar en un reality show vespertino de Antena 3, El Diario de Patricia. El ex novio y presunto asesino, con historial de maltratador y orden de alejamiento incluida (eso sí, no vigente), había recurrido al alarde de la contrición pública para pedir en el plató y ante la audiencia una nueva oportunidad. Allí mismo fue rechazado por la víctima, que en este caso era la que no sabía a lo que venía; expresión que hay que aplicar, a la vista de los hechos, en todo su tremendo significado.
