El artículo muestra un retrato de cómo los más pequeños pueden desarrollar sus capacidades para construir mensajes audiovisuales con una lógica narrativa. Una selección de varios ejemplos, producto de talleres de alfabetización audiovisual infantil, sirven de modelo para dar a conocer la práctica del formato gráfico del Story Board. Se trata de una forma atractiva de hacer comprensibles los fundamentos básicos de la narrativa audiovisual a chicos a partir de los 7 años de edad. Sus primeros garabatos van esquematizando ideas, a menudo creativas, en cada
cuadro de un Story Board que ha sido ideado por ellos mismos.