Hace poco menos de cinco años teóricos del fuste de Manuel Castells en Redes de de indignación y esperanza: los movimientos sociales en la era de internet, imaginaban que la redes sociales serían una herramienta privilegiada, no sólo de mejora de la comunicación a nivel global, si no que mucho más contundentemente se convertirían en plataformas de intervención sociopolítica, que cambiaría de raíz la naturaleza de las relaciones sociales en países como los árabes, o en donde la democracia distara mucho de la que practicamos -o deseamos-, en algunos rincones del mundo occidental.
Algo sucedió en el camino, las promesas tan estentóreas de la tecnología emancipatoria no se cumplieron jamás. Al revés a fines del año 2016 nos encontramos con la tremenda sorpresa de que un outsider de la política se hizo del poder en Estados Unidos haciendo ab(uso) de las redes sociales del modo mas insospechado.
Si bien todavía falta atar unos cuantos cabos, no hay duda de que el saqueo (tolerado o ignorado por los mandamases de Facebook) permitió que se instalara un aparato de propaganda y de manipulación de la opinión pública jamás visto antes.
- : http://www.filosofitis.com.ar/2017/11/06/facebook-y-las-otras-gafas-la-maquina-de-hacer-desear-mas-poderosa-de-la-historia/
- : Alejandro Piscitelli
- : Filosofitis