“Los chicos de hoy – suelen decir padres, abuelos y maestros- no son como los de antes ». Y tiene mucha razón. Los chicos de hoy no son como los de antes, entre otras cosas, porque su vida cotidiana es hoy muy diferente.
Los chicos que tienen menos de 18 años son la primera generación que ha conocido desde su infancia un universo mediático extremadamente diversificado: la radio (AM y FM), canales de TV (abiertos y por cable), video juegos, video cassetera, DVD, Internet…
La distinción entre medios nuevos y medios tradicionales no tienen para los chicos de hoy ningún sentido. Son los adultos quienes sienten las rupturas tecnológicas, los nuevos aprendizajes que deben emprender y los nuevos usos sociales de los medios que deben ejercer.
Los chicos, en cambio, han aprendido al mismo tiempo a utilizar el control remoto de la televisión, el equipo de CD y la computadora personal. Las conversaciones con sus amigos giran tan pronto sobre la música de una FM, sobre una serie de TV o sobre un nuevo programa en Internet. Sólo los libros – en su forma más tradicional y sin imágenes- les parecen lineales y en blanco y negro. Los libros suponen para ellos una lectura lineal que difiere de sus prácticas habituales con los otros medios.